La diferencia principal entre un telescopio refractor y otro reflector es que los telescopios refractores poseen lentes mientras que los telescopios reflectores utilizan espejos, pero ambos equipos concentran la luz de los objetos celestes en el ocular del telescopio para ayudarte a observarlos.
Telescopio refractor vs reflector
La diferencia principal entre un telescopio reflector y refractor se encuentra en el tren óptico, es decir, los elementos ópticos que capturan y concentran la luz estelar en el ocular del telescopio.
Como puedes apreciar en las imágenes, el telescopio refractor posee una lente de cristal que refracta la luz estelar y la concentra en el ocular del telescopio para que puedas observar una imagen magnificada de los astros.
Mientras que el telescopio reflector posee un gran espejo primario altamente reflectivo al final del tubo óptico que refleja la luz estelar hacia un pequeño espejo secundario que la vuelve a reflejar hacia el lateral en donde se encuentra el ocular que te ayudará a observar la Luna, los planetas y las estrellas.
¿Cuál es la mejor elección un telescopio refractor o reflector?
Elige un telescopio refractor si vives en una ciudad porque las brillantes luces del alumbrado público te impedirán observar los objetos débiles del cielo nocturno, aunque si puedes desplazarte a cielos libres de contaminación lumínica elige un telescopio reflector.
Los telescopios refractores son más fáciles de usar porque no requieren mantenimiento, es muy sencillo transportarlos debido a sus pequeñas dimensiones y te ayudarán a observar imágenes nítidas, brillantes y contrastadas del cielo nocturno.
Sus lentes provocarán un ligero cromatismo que percibirás como una sutil sombra azulada o rojiza al observar los planetas, además sus pequeñas aperturas capturarán poca luz estelar lo cual dificultará la observación de objetos débiles del cielo nocturno como nebulosas, galaxias y cúmulos de estrellas.
Sin embargo, los telescopios refractores son la mejor elección para ti si vives en una ciudad y no puedes alejarte de las brillantes luces de las ciudades que te impedirán observar los objetos débiles del cielo nocturno.
Afortunadamente la contaminación lumínica no afecta a los objetos celestes más brillantes del cielo como la Luna, los planetas, el Sol, algunas nebulosas brillantes como la nebulosa de Orión y cúmulos de estrellas como las Pléyades.
Debido al intenso brillo de estos cuerpos celestes el telescopio refractor puede capturar la luz estelar necesaria para revelarte sutiles detalles de sus superficies como los cráteres de la Luna, las bandas de colores de Júpiter y sus lunas galileanas o los asombrosos anillos de Saturno, incluso podrás observar las manchas solares del Sol (con un filtro solar adecuado) o algunos detalles de nebulosas y cúmulos de estrellas brillantes.
Sólo ten en cuenta que es mejor comprar un telescopio refractor con la mayor apertura posible y con una distancia focal larga para que te ayude a alcanzar altos aumentos, además es fundamental que incluya una montura altazimutal o ecuatorial con mandos de movimiento lento para evitar molestas vibraciones en la imagen.
Un telescopio refractor que posee estas características y te recomendamos comprar si eres principiante es el Celestron Starsense Explorer DX 102 AZ.
En cambio, si puedes desplazarte a zonas alejadas de las ciudades, como una reserva natural, o si vives en el campo la mejor elección para ti podría ser un telescopio reflector.
Los telescopios reflectores poseen grandes aperturas que capturan mucha luz estelar y son perfectos para observar objetos débiles del cielo nocturno como galaxias cercanas, nebulosas y cúmulos estelares, además suelen ser muy económicos.
Debido a sus grandes aperturas suelen ser telescopios voluminosos, necesitan colimarse frecuentemente, es decir alinear sus espejos con un colimador láser y no son los equipos más nítidos porque el espejo secundario obstruye ligeramente la entrada de luz estelar.
Sin embargo, los telescopios reflectores son la mejor elección para ti si deseas observar objetos débiles de cielo profundo porque son los telescopios más luminosos del mercado.
Por cierto, también podrás observar la Luna, los planetas y el Sol (con filtro) con un telescopio reflector, las imágenes no serán ultra nítidas pero estarán libres de cromatismo y podrás apreciar muchos detalles de sus superficies.
Sólo ten en cuenta que debes comprar un telescopio reflector con la mayor apertura posible, en el mejor de los casos que posea un espejo principal parabólico para evitar aberraciones esféricas y que no incluya una lente de Barlow interna porque reduce la calidad de imagen.
Un telescopio reflector que posee todas estas características es el Celestron StarSense Explorer DX 130 AZ, otro modelo muy interesante que incluye montura ecuatorial es el Celestron Astromaster 130 EQ.
Finalmente te recomiendo considerar la compra de un nuevo diseño óptico que combina todas las ventajas de los telescopios refractores y reflectores, me refiero a los telescopios catadióptricos.